jueves, 27 de diciembre de 2018

Michael W. Balfe. The bohemian girl (La gitanilla).


Barítono, violinista y compositor irlandés (Dublín 1808–1870).  Hijo de un maestro de baile, tocaba el violín en la escuela de su padre, y a su muerte, marchó a Londres, donde estudió con C.E. Horn e inició su carrera como violinista de orquesta. Viajó a Italia y actuó como cantante en una representación de El barbero de Sevilla, de Rossini, en París, en 1827. Compuso Autor de casi una cerca de treintena de óperas, entre las que figuran Enrico Cuarto (1835), Falstaff (1838) y La rosa de Castilla (1857), la que más le recuerda es la que le relaciona con Cervantes. Como curiosidad, digamos que su hija Victoria, soprano de talento, estudió en Londres con Manuel García y casó, en segundas nupcias, con el Duque de Frías, residiendo por tanto en Madrid hasta su muerte en 1871.

El título original es The bohemian girl[1], y el texto fue escrito por Alfred Bunn, basándose en un ballet–pantomima de Jules Henry Vernoy de Saint–Georges. Se trata de una ópera en tres actos estrenada en Londres, Her Mayesty’s Theatro,  Drury Lane, el 27 de noviembre de 1843.  La acción se desarrolla en Presburgo (Bratislava, actual Eslovaquia) en el siglo XVIII.

Personajes e intérpretes del estreno[2]. Arline, hija del conde, soprano (Miss Rainforth). La Reina de los gitanos, contralto (Miss Betts). Buda, doncella de Arline, soprano.
Thaddeus, exiliado polaco, tenor (Mr. Harrison). Devilshoof, jefe de los gitanos, bajo (Mr. Stretton). El Conde Arnheim, gobernador de Presburgo, barítono o bajo (Mr. Borrani). Florestein, sobrino del conde, tenor (Mr. Daruset). Capitán de la guardia, bajo (Mr. Howell). Oficial, tenor (Mr. Binge).

Resumen argumental.  Thaddeus, noble polaco exiliado en Austria que convive con una tribu de gitanos, salva a una niña, Arline, hija del conde Arnheim del peligroso ataque de un venado. El Conde, como agradecimiento, invita a Thaddeus a un banquete, pero este se niega a brindar por el emperador austríaco (al que considera usurpador de su país) y escapa ayudado por el gitano Devilshoof, que aprovecha para raptar a Arline.

Pasado un largo tiempo, Arline, que apenas recuerda su niñez, se ha enamorado de Thaddeus, del que también está enamorada la Reina de los gitanos. Florestein, sobrino del Conde, se interesa por Arline, a la que no reconoce, pero al ver el medallón que lleva, cree que lo ha robado y ordena que la arresten. Llevada a presencia del Conde, que también actúa como juez, descubre en la muchacha la cicatriz que la dejó el ciervo, en consecuencia reconoce a Arline como su hija.

En un baile en el castillo del Conde, Arline siente nostalgia de su vida con los gitanos. Thaddeus, colándose por una ventana del castillo, consigue ganarse la confianza del Conde (con el que tuvo el desaire hace ya muchos años) y, al descubrirse como un noble polaco exiliado y no un simple gitano, obtiene la mano de la mujer. Pero no todo es felicidad. La Reina de los gitanos, que ha entrado al castillo por la misma ventana que lo hizo Tahddeus, pretende secuestrarlo y dar muerte a Arline, pero, antes de que pueda hacerlo, Devilshoof forcejea con ella y consigue desarmarla, pero la Reina, en la pelea resulta malherida y muere.


Comentario. The bohemian girl tuvo un éxito muy importante; llegó a estar en cartel durante un centenar de noches y enseguida pasó a representarse en otras ciudades: Nueva York, Dublín y Filadelfia, en 1844,  Viena y Sidney en 1846, Praga en 1847, Berlín en 1850, en diversas ciudades italianas en 1854 y en París en la temporada 1868/69. En Madrid se vio en 1845. Alguna de sus arias  ha sido muy interpretada por sopranos de primera categoría. 

The bohemian girl es partitura amable, en la que se encuentran momentos de distintos estilos, arias en la clásica línea del belcanto, ritmos marciales, danzas con gran personalidad folclórica, intervenciones de carácter de opereta.  

En el estreno se repitieron varios números: el coro el coro de gitanos con  Devilshoof como solista (“In the gipsy’s life”), del primer acto; el aria de Arline (“I dreamt that I dwelt in marble halls”), del segundo acto;  el aria del Conde, también del segundo acto (“The heart bowed down”), y el aria de Thaddeus (“You’ll remember me”) del tercero.

The bohemian girl fue llevada al cine en 1922 en una película muda  en el Reino Unido, pero la versión cinematográfica más famosa fue la realizada en 1936 que interpretaron Stan Laurel y Oliver Hardy, los populares cómicos “El gordo y el flaco”. J.P.M.
 

CONCIERTO

The bohemian girl.

La obertura y una selección de arias.
Rebeca Cardiel, soprano.
Francisco Díaz Carrillo, tenor.
Orquesta Sinfónica Verum.
Director: Miguel Roma.
Auditorio Nacional de Música – Sala sinfónica – Madrid.
11 de enero de 2019 – 19.30 horas.
XLVI Ciclo de Grandes Autores e Intérpretes de la Música.
Universidad Autónoma de Madrid.


 




[1] Hemos visto traducido el título, directamente, como La chica bohemia. Puede ser lingüísticamente correcto, pero considerando que la ópera está remotamente basada en La gitanilla cervantina, aunque llega al libreto a través de otras obras, nos parece este título más adecuado.
[2] Según la fuente consultada aparecen intérpretes distintos. Nosotros utilizamos como referencia la biografía de WM. Alexander Barret (Balfe. His life and work),  editada en Londres, en 1890.

miércoles, 12 de diciembre de 2018

Antonio F. Reymonde. La razón de la sin razón.


Pianista, compositor y director de orquesta español, autor de un número importante de obras para distintas formaciones, con las que ha obtenido varios premios internacionales. Es profesor del Conservatorio Profesional de Música de Ciudad Real.


Su obra quijotesca, titulada La razón de la sin razón que  mi razón se hace, es página escrita para el órgano histórico de la iglesia parroquial de Torre de Juan Abad (Ciudad Real), construido por Gaspar de la Redonda en 1763. El estreno tuvo lugar el 11 de septiembre de 2010, por el organista Jesús Fernando Ruiz García.

La oba trata “de la vida vacía y monótona del hidalgo que se describe en el primer capítulo de la novela, en contraposición a la inquietud de su mundo interior –como consecuencia de la ansiedad que le provoca la fantasía en las lecturas de novelas de caballería– y ñas “razones” que le llevan a cambiar de vida[1]

En 2015 adaptó la obra para un grupo de cámara de viento metal  del Conservatorio Marcos Redondo, de Ciudad Real, que la dio a conocer el 25 de mayo.

La obra es “una exploración de las formas del XVI y del XVII para acoger en ella una nueva escritura que trata de ser fiel al movimiento psicológico que impulsa la salida del hidalgo manchego.  Se estructura en los siguientes movimientos:
-       Preludio de Alonso Quijano.
-       Diálogos del ama y la sobrina (Diferencias – Danza del Hacha).
-       Interludio.
-       Paisaje manchego (Mixturas).
-       Interludio.
-       Fiesta (Tiento de primer tono, a 4 voces).
-       Interludio.
-       Metamorfosis de Don Quijote de la Mancha (Madrigal). J.P.M.


[1] Pastor Comín, Juan José. “Suba sobre esta máquina el que tuviere ánimo para ello (Don Quijote, II, XLI): Compositores castellano-manchegos a lomos del Clevileño”. En  Capdepón P. y Pastor, J.J. (Eds). El patrimonio musical de Castilla-La Mancha: Nuevas perspectivas. pág. 292 y ss.

lunes, 10 de diciembre de 2018

Francisco A. Barbieri. Don Quijote de la Mancha.


Francisco Asenjo Barbieri (Madrid, 1832-1894), compositor de zarzuelas, creador de la moderna musicología española,  promotor de numerosísimas actividades relacionadas con la música, fundador de la Sociedad de Bibliófilos Españoles, de la Sociedad de Conciertos y miembro de las Academias de la Lengua y de Bellas Artes, escribió sobre el tema que nos interesa, música incidental destinada a una representación del drama en tres actos Don Quijote de La Mancha de Ventura de la Vega.

Una partitura titulada Don Quijote en Sierra Morena, citada en algunas ocasiones, no debemos considerarla por las razones que enumeramos más adelante.

Es muy curioso, además, que ninguna de estas obras de Barbieri figure en las recopilaciones de Juan Sedó, ni tampoco en la de Felipe Pérez Capo.

Una referencia sobre Don Quijote de la Mancha, que algunos consideran zarzuela,  los proporciona el mismo Barbieri y la transcribe Emilio Casares, en su biografía del músico madrileño[1]:


El martes 23 de abril de 1861 la Real Academia Española celebró por primera vez el aniversario de la muerte de Cervantes con una función religiosa en la iglesia de las Trinitarias[2]. En el mismo día el Teatro del Príncipe hacía también una función conmemorativa en la cual se representaba la comedia D. Quijote de la Mancha que aunque rigurosamente no pertenece al género de la zarzuela[3], yo la incluyo en esta colección porque hice para ella la música del ovillejo[4] de Cervantes que canta Cardenio en el primer acto, un baile característico español para el segundo y una marcha y coro final para el acto tercero y cuya marcha heroica compuse sobre el motivo de las seguidillas manchegas.
Adjunto va el autógrafo de Ventura de la Vega perteneciente al coro final, una carta del mismo Vega y la comedia impresa y con dedicatoria y décimas autógrafas también de Vega. También acompaña una carta con que mi amigo D. Pedro Delgado, primer actor y director del Teatro del Príncipe acompañaba un obsequio que me hizo de un tintero, una pluma, cuchillo de cortar papel y sello, todo de madera tallada y construcción alemana, por haberle yo compuesto sin retribución alguna la música indicada”.

viernes, 7 de diciembre de 2018

José Antonio Esteban Usanos. El caballero de la Triste Figura.



José Antoio Esteban Usanos
Compositor español (Cuenca, 1968, se formó en el Conservatorio de su ciudad natal y en el de Madrid con profesores como Zulema de la Cruz o Antón García Abril.  Es, desde 1996, profesor de Armonía y Análisis en el Conservatorio Profesional de Música conquense y autor de música sinfónica y de cámara.


El caballero de la Triste Figura, es obra para narrador y orquesta encargada por Ignacio Yepes, director de la Orquesta Clásica Santa Cecilia, que puso como requisito que la partitura estuviera escrita para la misma formación que La historia del soldado, de Igor Stravinsky, es decir, para trombón, fagot, clarinete en La, contrabajo, trompeta (en sustitución de la corneta de pistones), violín y percusión. El texto fue elaborado por el propio compositor a partir de textos del Quijote.

El estreno, en el que actuó como narrador Javier Ortiz, se produjo el 18 de agosto de 2005, en Colindres, dentro del Festival Internacional de Santander.

 La obra se estructura en siete movimiento:
1 – Los personajes.
2 – El encuentro con los gigantes.
3 – La batalla en el reino de Micomicón.
4 – El carro de Las cortes de la muerte.
5 – Dulcinea del Toboso.
6 – Clavileño en el Alígero.
7 – Muerte de Don Quijote.

Miguel Magdalena. En un lugar del Quijote.




Versión teatral libre de la novela cervantina realizada por la Compañía Nacional de Teatro Clásico de España, en coproducción con Ron Lalá. Se estrenó el 19 de diciembre de 2013, en el Teatro Pavón de Madrid, y ha sido representada en varios otros lugares.

Con dirección de Yayo Cáceres, fue interpretada por  Juan Cañas (Cervantes, Niño, Pastor, Ama y Duquesa), Íñigo Echevarría (Don Quijote de la Mancha), Miguel Madgalena (Barbero, Vizcaíno y otros personajes) y Álvaro Tato (Cura, Sansón Carrasco y otros). El equipo técnico lo formaron:  Miguel Ángel Camacho (Iluminación), Curt Allen Wilmer (escenografía) y Tatiana de Sarabia (vestuario).

Fue responsable de la música Miguel Magdalena, que empleó además de las voces de los protagonistas, la guitarra, sintetizadores y otros elementos electrónicos, además de pequeña percusión y algún instrumento infrecuente, como el serrucho .

Durante casi toda la representación hay lo que podemos llamar música ambiental, pero además se ofrecen canciones de distinta entidad y duración que resaltan momentos determinados de la historia. Sin que podamos hablar de ellas en el sentido del teatro lírico, podemos citar la intervención de Cide Amete, los ovillejos (que añaden una estrofa original de esta producción), un simpático número dedicado a los refranes en boca de Sancho, una canción dedicada a la Edad de Oro, otra al yelmo de Mambrino-bacía de barbero y una música de danza, sobre la que Don Quijote ofrece un recitativo. Estos fragmentos se refieren a la primera parte de la novela.

La música relacionada con la segunda parte se abre con un recitativo en la salida de Don Quijote, siguen un número instrumental sobre la pelea de Sansón Carrasco y el Caballero, unas coplas sobre el libro del Quijote y otras alusivas a la llegada a la corte de los Duques, un alegado de Sancho como gobernador, una referencia a uno de los procesos judiciales protagonizados por el escudero, la batalla  y despedida de Sancho de Barataria, y unas coplas finales que justifican la ausencia de otras aventuras de la novela. J.P.M.