domingo, 11 de marzo de 2018

Tomás Marco. Clavileño: Blog de vuelo.




Nacido en Madrid, en 1942, Tomás Marco está considerado como una de las figuras más importantes de la música española de nuestro tiempo. Su formación es muy personal y recoge enseñanzas e influencias de Gombau, Bernaola, C. Halffter, L. de Pablo, Stockhausen, Boulez, Kagel y Maderna, entre otros. Conferenciante, crítico musical y responsable de distintas entidades musicales españolas, Tomás Marco es, además, un prolífico compositor, cuyas obras se escuchan con frecuencia dentro y fuera de nuestro país. De su amplio catálogo podríamos recordar su ópera Selene, cinco sinfonías, varios conciertos para instrumento solista, muchas obras para distintas formaciones instrumentales, una cantata, Autodafé, con la que obtuvo el Premio Arpa de Oro, en 1975. En el mundo organizativo ha sido responsable de distintas áreas de RNE entre 1967 y 1981,  gerente de la Orquesta Nacional de España, director del Centro para la Difusión de la Música Contemporánea y del  Festival Internacional de Música de Alicante, y consejero de la Sociedad de Autores. Es Académico de Bellas Artes de San Fernando y ha recibido numerosos premios, galardones y distinciones, encabezados por el Premio Nacional de Música en 1969.

Encargo de la pianista Marta Espinós, con este Clavileño: Blog de vuelo, Marco se acerca por quinta vez a la figura quijotesca. Según él mismo, en esta partitura “no hay una intención descriptiva, ni siquiera evocativa, sino la de realizar una especie de narración abstracta de diversos estados de ánimo y diversas esferas por las que transcurre un viaje que es completamente virtual. De manera que nos encontraríamos ante una especie de cuaderno de bitácora del vuelo imaginado. La música traduce este viaje con  leves sonidos, sin densidad, sin acompañamiento, sin densidades, sin acumulaciones, creando un ambiente leve”.
No obstante lo dicho por el autor, nos parece posible “ver” el andar fantástico de la mágica cabalgadura. Clavileño tiene una duración cercana a los 5 minutos.

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